martes, 31 de enero de 2017

Desintegración de España (MCRC Paco Bono)

Desintegración de España

Paco Bono


Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional –MC RC
DIARIO ESPAÑOL De la República Constitucional

Una hilera de cientos de miles de personas cruzando Cataluña… 11 de Septiembre de 2013, los nacionalistas catalanes demuestran que van en serio, que no se trata ya del juego victimista del “dame más”. España está al borde de la ruptura, pero todavía hay ingenuos que se preguntan, ¿cómo es posible? En su estrategia, hay que aplaudir a los secesionistas, pues van a lograr en apenas 30 años lo que dicen llevar defendiendo desde 1714, año en el que entraron en España los Borbones de la mano de Felipe V, el peor enemigo de todo nacionalista catalán, pero también su razón de ser contra España. Por ello resulta más que chocante que haya sido otro Borbón quien haya facilitado este proceso de desintegración nacional…
Todo empezó con el nombramiento de Juan Carlos como heredero de Francisco Franco a título de Rey. Las Cortes borreguiles de entonces, como lo son las de ahora, aplaudieron con sus vestimentas negras. La España de aquellos días todavía era una España en reconstrucción, mutilada… Sólo unos pocos** se dieron cuenta de lo que tal nombramiento significaba: la negación de un periodo de libertad constituyente para el pueblo español. Levantado el pilar, el proyecto de falsa democratización de las instituciones españolas se puso en marcha con la muerte del dictador, no sin el apoyo de las potencias extranjeras, temerosas de que entrara con fuerza en España el comunismo. Fue entonces cuando los partidos mayoritarios, una vez traicionado el pacto por el cual habían acordado que permitirían que el pueblo español eligiera en plebiscito la forma de Estado y de gobierno, se postraron ante su “Majestad” y fundaron lo que se conoce como el “consenso político”: “el rey reinará y nosotros nos repartiremos el poder limitando la intervención de la sociedad a unos sufragios no electivos (votación por listas con reparto porcentual de poder, socialdemocracia)”.
Sin embargo, no debemos entender el consenso como un acuerdo constructivo entre los grandes partidos, sino como un punto de partida entre los grupos unionistas y los secesionistas. El consenso supuso ante todo la victoria de los nacionalistas, porque de él derivaron una serie de falsedades y contradicciones que permitirían a los enemigos de España avanzar en la aniquilación de cualquier vínculo entre Cataluña, Vascongadas y el resto del país. Pero su mayor logro se fraguó cuando al idolatrado Adolfo Suárez, director de orquesta en los inicios de esta atrocidad, se le ocurrió la idea del “café para todos”, que conllevó la fundación de las comunidades autónomas, formalizándose así el proceso de nacionalización autonómica o imposición nacional del modelo secesionista.
Como ya han demostrado numerosos protagonistas, periodistas e historiadores, el 23 de febrero de 1981 se intentó echar por tierra el “café para todos” mediante un golpe planeado por el propio Estado* que tenía como fin la formación de un gobierno de concentración que rectificara los errores de Suárez. Pero el golpe fracasó por un error de cálculo, eligieron a un estúpido reaccionario para la toma del Congreso, Tejero se lió a tiros y no permitió que el hombre de confianza del Rey, el general Armada, fuera investido presidente del gobierno por los señores diputados. Ya no había vuelta atrás… Y este acontecimiento, cómo no, se tapó con más mentiras.
El sistema que establece la Ley fundamental de 1978 (me niego a llamarla Constitución, puesto que no separa los poderes del Estado de raíz) convierte España en una Nación cuyo Estado se rige por una monarquía parlamentaria sometida a la partidocracia, en la que son los partidos los que acaparan el poder en todas y cada una de las instituciones del Estado, ya sean autonómicas, provinciales o municipales. El Rey se supone como garantía de la unidad de la Nación, bajo la absurda creencia de que la monarquía aglutina el sentimiento y la moral de la unidad de España, cuando ese sentimiento de hispanidad lo fundó Roma con la instauración de Hispania como provincia de su Imperio.
Al nuevo sistema de gobierno lo llamaron democracia, sabiendo que de ningún modo lo era, puesto que una democracia representativa requiere de una forma de Estado republicana previa, además de la mencionada separación de poderes. Como ejemplo sirva Gran Bretaña, cuya forma de gobierno no ha sido nunca la democracia, su forma de Estado es la monarquía parlamentaria, como lo es también la de España, pero con el matiz de que allí se no ha engañado a nadie, ni tienen constitución ni la necesitan; ahora bien, los diputados que llegan a la cámara de los comunes representan cada uno a su distrito, cosa que aquí no sucede. En el Reino Unido no hay listas, ni abiertas ni cerradas. La solución española es fraudulenta y mentirosa de raíz, y muy dañina en su desarrollo. La España de hoy está más dividida que nunca en su historia. El pueblo español, que fuera muy bravo en otros tiempos, deja hacer y observa atónito la desintegración de su país en manos de una oligarquía de partidos y un Rey que siempre han permanecido unidos al nacionalismo, porque el “consenso político” era imposible sin los separatistas. ¿Qué alternativa hay para la unidad de España y para la democracia? Empecemos por reconocer la realidad, instruyámonos en la libertad política, eduquemos a nuestros hijos para que luchen por su prosperidad sujetos a una moral. España puede ser si no callamos los que aún tenemos ganas de luchar por ella.

*Referencias sobre el 23 F tomadas de “23-F, el Rey y su secreto” Autor: Jesús Palacios.
**Para más información sobre los sucedido antes, durante y después de la Transición, lean lo escrito por Don Antonio García-Trevijano Forte.

lunes, 30 de enero de 2017

De vaskoñas y kastellanos antikísimos (Juan Pablo Mañueco)



DE VASKOÑAS Y KASTELLANOS ANTIKÍSIMO
EN UN FB DE UN AMIGO (pero descarriado), me he encontrado las palabras “pintxo” y “perrotxico”, porque había ido a tomarse unos pinchos a Vitoria (que es castellanoparlante desde la época de Fernán González e incluso desde época visigoda), así que le he puesto estas notas en su muro o entrada:
Juan Pablo Mañueco: Me encanta todo… menos la TX, y la K, que tienen de vasco lo que yo de marciano. Son letras latinas/castellanas, puestas a “lo raro” para que parezcan vascas… Porque el “puro” -corrompido hasta la médula- vasco no tiene ni alfabeto y ha cogido el abecedario castellano.
Por cierto, ni la lengua vasca ni la vaska son más antiguas que el castellano: ambas son de la misma antigüedad (de cuando la Humanidad rompió a hablar).
Lo que pasa es que el castellano es de padre conocido -desde el latín y éste de otro y éste otro y de otro anterior difuso y ya indetectable, etc., hasta llegar a ser kastellano- y así hasta Adán y Eva, komo todas las lenguas, ya lo he ditxo antes: ke todas las lenguas son igualmente antiguas.
Unas de padre conocido (y con un peso cultural que ya, ya; incluso en tiempos del padre), y otras sin padre apreciable (pero existente previo) aunque sin peso alguno o con poko peso kultural.
Lo que pasa es que el castellano (o bien, dicho a lo “basko” o a lo vallekano) el kastellano ha evolucionado y se ha hecho ágil para el siglo XXI, y el vascuence NO, salvo en lo que copia a las ágiles lenguas modernas como el “kasteyano” (¡demontre, qué peculiar y diferente me ha salido esta última parida y gran txorrada!)
En kuanto se fanaticen unos kuantos kastellanos kambiamos la hortografía y pedimos la independencia, o un concierto económico en base a nuestros antiguos fueros (que, claro es, tuvimos como todo el mundo. De hecho era el rey de Kastilla el que concedía los fueros a los vascos y a los kastellanos) o por lo menos un Hestatuto de Hautonomía de primera klase, ke eso sí que faría falta y mutxa falta que nos faría a los kastellanos o castellanos…
¡Kuanta gilipollez euskalduna de don Sabino Harana, convertida en dogma de fe fanátika, Jesukristo!
KUÁNTA VERDAD KE ASÍ NO PUEDE SEGUIR KASTILLA
Pero kuánta verdad en que Kastilla debería ser una, rekonocida y al mismo nibel que las otras ne-cionalidades ispanyolas, ke más que Kastilla no son.
¡Non, non lo son…! Digo, repito y me refago en lo ditxo que non e que non son más que Kastilla!
¡Y a mí que me suena lo de “Perrotxico”…!, -guau, guau, guauíto- ¡ké basko, koño!
Son cómo niños, y los que no les dicen estas verdades, hacen el juego a los nenes baskistas, ke tienen una inteligencia como la de mi gato txico.
Y por cierto los bárdulos son tan antiguos como los vascos, pero los castellanos presumimos menos de ser antiguos, pese a que somos bárdulos puros (lo que pasa es que no nos ha dicho nadie quiénes son nuestros abuelos los bárdulos: bueno, yo sí lo he ditxo en un libro ke se llama: “Castilla, este canto es tu canto” (2015), en dos tomos de mucho tomo y lomo).
¡Ke el cielo nos hampare de kalimotxeros, ke empinan el kodo mutxo en Bilbo (el Bilbao de toda la vida desde la Edad Media, en Donostia -¡ay, ké daño la hostia,(la hostia de daño me ha hecho Donostia) y eso que es una hostia de San Sebastián!-, y en Gasteiz -desde el siglo VIII, Vitoria, puesto que visigodos fueron sus fundadores, y no baskos-, pero se ve que los kalimotxeros en materia lingüística… vaskoñan por un tubo!
Y menos mal ke ya no matan estos soplatxistus por este alfabeto castellano vaskonizado a golpe de capricho batúa, o sea, inventado... Pero siguen dando la murga, la matraka y la tabarra con este inkordio de querer ser más que nadie, y creyéndose más antiguos e importantes que ninguno.
¡Ké kruz, Maitetxu y Txumari; ké kruz! ¡El día que los castellanos nos empecemos a dar la importancia que sí tenemos, esto de la igualdad entre los habitantes de España empezará a ser real…!
¡Venga, kastellanos, a ver si nos empezamos a dar cuenta ya, que eso sería bueno para nosotros y para la igualdad territorial de España!
¡Ahora, los que deberían kallar por su poka monta kultural, no paran de sakar petxo y de presumir no se sabe de ké! (y de sacar perras txicas y perras grandes y más euros que nadie por ser supuestamente pekuliares más que los demás).
Venga matraka, venga matraka con ke son muy antiguos, vetustos o betustos y antikuados… Bueno, un poco antikuados e imbentandos artificiosamente sí ke son.
Repetabilísimos, y yo les respeto… Pero tanta matraca por tan poka txitxa, y kerer privilegios fiskales por ello, cansa. Oye, ¿para ké nos vamos a engañar?: kansa… ¡Kansa mutxo, koñe!
Respeto sí, pero para todos. También para los castellanoparlantes de allá y para la antiquísima Castilla/Castiella/Bardulia de aquí.
ANTIKÍSIMOS PERO IGNORADOS KASTELLANOS
Porque si nos ponemos a hacernos los antiguos, sakamos nosotros a los autrigones, caristios, arévakos, vaceos, carpetanos, vetones, turmódigos, pelendones, berones, titos y belos y etc., y nos kedamos solos presumiendo de pueblos antiguos prerromanos.
Que para eso nuestro territorio castellano es más grande y tenemos más pueblos viejos de los que presumir y estar ufanos, si quisiéramos.
Y por cierto el que quiera saber dónde estaban los bárdulos en época romana (es decir, cuando los vascones se subieron huyendo del invasor hasta los Pirineos, y allí se estuvieron hasta que escampó la dominación romana) que vea el escudo de Guipuzcoa y verá una cartela que pone (en latín, o sea en el padre del castellano, no en vasco): “Fidelissima Bardulia, nunquam superata”.
OJO CON LOS DERETXOS HISTÓRICOS, KE A LO MEJOR TENEMOS MÁS NOSOTROS
Es decir, que si nos pusiéramos tontorrones los bárdulos/castellanos con esto de los deretxos históricos… reivindicamos Guipúzcoa y toda su tierra y costa como tierra nuestra, porque allí estábamos los bárdulos hasta que bajaron del Pirineo después de Roma los vascones, en pie de guerra y sobre todo de hambre, y los bárdulos perdimos a katxiporrazos la “Fidelissima Bardulia…”, o sea, la actual Guipúzcoa que algunos llaman…
Aunque yo, en mi círculo de amigos íntimos, llamo a esa tierra Bardulia Vieja, y sé que digo una gran verdad bárdula.
Lo que pasa es que luego los bárdulos nos desplazamos un poco por la costa y fundamos nuestra capital en “Castro Bardulies” o “Castro Vardulies” (el castro de los bárdulos): Castro Urdiales.
De forma que ojito con ponerse farrukos (que ya son 150 años de farrukería). Las dos lenguas de Guipúzcoa y Vasconia son ambas respetables: la más antigua en la zona, o sea, el kastellano; y la más reciente en el lugar, o sea, el vasco.
Pero sin imposiciones monolingüsiticas de nadie: sin tiro en la nuka, ni sekuestro, ni bombazo terrorista, komo hacían algunos hasta hace poko; ni por la abrumadora superioridad de la CULTURA escrita en una de las dos lenguas de Guipúzcoa (y Vasconia) sobre la otra.
Y a ser posible también sin vascoñas sobre ningún tema, porque Vasconia es territorio respetable pero con DOS LENGUAS
Ya lo dice la propia palabra de provincias VASCONGADAS (o sea, “vasconicatas” -en latín-; o vasconizadas -en castellano mas claro-, porque antes de que las vasconizaran por la fuerza los invasores y okupas vascones, NO eran vascas, sino bárdulas, como queda claro).
Y nos pesentamos en la playa de la Concha, diciendo: “Volvemos a casa, bárdulos, vamos a darnos un bañito en las aguas de nuestros antepasados”. Por aquello de ser respetuosos con la ley vieja.
Pueblos hay que fueron expulsados muchos siglos antes que los bárdulos de su tierra originaria… y han retornado a Jerusalén (y no quiero señalar a nadie)… Así que todo es proponérselo y, quién sabe, con un poco de esfuerzo… pactamos por lo menos que el castellano es tan de San Sebastián y Vasconia (o más) como el vascuence… y nos ahorramos tanta lutxa txorra como llevamos desde hace siglos, guerras carlistas y monsergas todo el siglo XX y XXI, que ya huele tanto no kerer saber la realidad.
Y LUEGO DESDE CASTRO URDIALES, ¡HALA A CONSTRUIR KASTILLOS Y CASTILLA!
Y desde allí, desde Castro Urdiales, los bárdulos, cuando llegó la invasión musulmana en el siglo VIII, ¡hala, allá arriba de los peñascales que se fueron, a la Cordillera Cantábrica! ¡A sellar los desfiladeros montañosos con pequeños castros o “castillos” y a ser conocidos ya desde entonces esta tierra y estas gentes (las mismas que las anteriores) como “Castilla” y “los castellanos”.
“Bardulia, que ahora llamamos Castilla”, que dicen los documentos latinos, a partir del siglo IX
¡Así que menos presumir de antiguos, señores y amigos vascos, ke en Iberia, das una patada al suelo y salen antikísimos pueblos por todas partes!
Lo ke estoy diciendo en prosa rara, ahora lo voy a decir en verso claro, para que rime y todo:
UN PERGAMINO ASIENTA EL NUEVO NOMBRE
Septiembre, a quince días
del año ochocientos, se documenta
que las finas estrías
de un pergamino sienta
voz “Castilla” escrita, aún somnolienta.
“Ego, Vitulus, abba,
in Taranco et in territorio Mene”

un cenobio fundaba
que aún hoy nos resuene:
Signa que está… “in territorio Castelle”.
Es Taranco de Mena
el que por primera vez significa
que una montaña -plena
de ciudadela chica
o castillo-, el son de “Castilla” aplica.
Aún geografía
el apodo latino es -los castillos-,
igual que se diría
de altura breve, altillos,
de leves, suaves puertos, los portillos.
LA DENOMINACIÓN GEOGRÁFICA SUPLE
AL ANTERIOR NOMBRE DE GENTES. BARDULIA ES YA CASTELLA -LOS CASTILLOS-
Andando el siglo nueve
“Castilla” -los castillos- nombrar entera
a Bardulia se atreve,
pues gente misma viera
ya no sólo bárdula raza hubiera,
sino que es gente nueva,
ibera, bárdula, goda, romana…
que en viejas fuentes beba
por manar la mañana
que, en “los castillos”, surge castellana.
Y a lo largo del nueve
“Bardulia, qui nunc vocamus Castella”
se extenderá en relieve:
norte de Burgos sella
y en Cantabria, Palencia, Álava halla huella.
¡Bardulia, ya Castilla
todos te llaman;
las peñas de allá arriba
por tal te aclaman!
¡Se elevan los castillos
con gozo, ufanos,
desde que les han dicho:
“sois castellanos”!
Si ibera es la semilla;
la llama, bárdula;
visigoda es la guía;
habla, romana.
Lo primero refuerzan
propias montañas,
y después “los castillos”
al valle bajan.
Mirad, que “los castillos”
su tierra agrandan,
“Castilla” iza sus filos
de luengas barbas.
Mirad, que ya Castilla
es castellana:
¡Muros, y en cada esquina
torre almenada!
(Del libro “Castilla, este canto es tu canto. Parte I” -2015-)
¡Ah, y todavía conservamos en nuestro actual castellano palabras de esos pueblos antiguos que fuimos y somos, aunque sería artículo distinto si ahora me pusiera a hacer relación de dichos términos iberos que perviven en nuestra ágil lengua de hoy!
Así que pondré una palabra solo, a guisa de ejemplo de lo que digo… Va en la firma y concluyo:
Juan Pablo Mañueko, bárdulo puro, como indica mi prerromano/bárdulo apellido.
Posdata para políticos y políticas a los que de verdad les interese la igualdad, y si no hacen caso es que nos les interesa (que a lo mejor es cierto que no).
Polítikos y polítikas (e idearios polítikos de los unos y de las otras) de los viejos y nuevos partidos, ¡a ver si nos enteramos de que akí en España todos somos o deberíamos ser iguales o, si no, los perjudikados, ninguneados, divididos y empobrecidos somos los kastellanos!
¡Y komo que no mola, señores y señoras polítikos y polítikas!
Hagan caso a este artíkulo (con perdón por la terminación), o se notará mutxo que a ustedes los polítikos y las polítikas la IGUALDAD territorial se la refanfinfla.
Y Kastilla/Castiella/Castilla también… aunque esto ya lo vengo yo notando desde hace cinco siglos, más o menos desde Carlos V.
¡No sé si me ekivokaré, ke kreo que non!
¡He ditxo, y en verdad digo que aunque lo parezca, he puesto muy pocas coñas (yo)…!
¡Otros dicen tantas, aunque muy serios, que no pongo yo la mano en el fuego con que se krean o no las koñas que kuentan en sus discursos un poquiello fanátikos!
Pero por esas koñas, más falsas que Judas, piden kuartos, kuartos y más kuartos que los demás, y así están de archihenchidos e inflados de orgullo y vanidad! ¡Por sus grandes koñas imbentadas! ¡Jesukristo, ké fatuos ke son y kuántos kuartos piden por sus vaskoñas!
¡Viva Kastilla, leñe!, con “C” o con “K”, pero que la dejen vivir, y reunificada, que eso será bueno para todos. Y será histórico, natural y, sobre todo, cultural de la misma magnífica cultura castellana.

viernes, 27 de enero de 2017

¿De qué se trata? (MCRC Vicente Carreño)

¿De qué se trata?

Vicente Carreño



Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional –MC RC
DIARIO ESPAÑOL De la República Constitucional

Así pues de lo que se trata es de:
En vez de Monarquía de Partidos Estatales, República Constitucional de ciudadanos libres.
En vez de Partidos Estatales, Partidos de la Sociedad.
En vez de Partidos financiados y pagados por el Estado, partidos de la Sociedad pagados y financiados por los afiliados.
En vez de Partidos institucionalizados, partidos de la sociedad implicados en los barrios, los pueblos, las ciudades, las comarcas y regiones.
En vez de partidos a la conquista del poder, partidos que luchan por los ciudadanos, por la libertad política y por la libertad de pensamiento.
En vez de Listas de Partido en circunscripciones provinciales, candidaturas uninominales de personas responsables en distritos pequeños.
En vez de sistema electoral proporcional corregido con la Ley d´Hont, sistema mayoritario a doble vuelta.
En vez de elecciones administrativas para elegir diputados y Presidente de Gobierno, elecciones políticas separadas entre sí, para elegir por separado al Presidente del Gobierno y Jefe del Estado por un lado y otras elecciones para la Cámara de Representantes (Diputados).
En vez de un solo poder con separación de funciones, tres poderes del Estado separados en origen para que unas ambiciones vigilen a otras… para que podamos hablar realmente de Democracia.
En vez de Tribunal Constitucional como máxima instancia judicial, -nombrado y elegido por los políticos-, Tribunal Supremo constituido al margen de la influencia del parlamento y del gobierno.
En vez de diputados irresponsables instalados en Madrid, diputados de distrito con oficina y residencia en la comarca por la que fueron elegidos, en contacto permanente con sus vecinos-electores y con posibilidad de deponerlos si no cumplen lo acordado con ellos, y por lo cual fueron elegidos.
En vez de Congreso de los Diputados y Senado, una sola Cámara de Representación de 400 representantes de todos los españoles, con un solo sueldo pagado por el distrito, no por el Estado.
Elecciones para alcaldes, separadas de las elecciones a concejales, en candidaturas también uninominales y a doble vuelta. El Alcalde en distrito único de todo el pueblo o ciudad, y los concejales por distritos o barrios.
En vez de concejales elegidos en listas de partidos, concejales elegidos en candidaturas de distrito y que representan a sus vecinos en el Ayuntamiento, y no al partido.
Los partidos políticos son la consecuencia lógica de la libertad de asociación, por eso no deben ser partidos del estado. Su lugar propio es la sociedad. Las personas elegidas así, podrán pertenecer a cualquier partido y tener ideologías diversas, pero en las instituciones representarán a los ciudadanos, no a los partidos.
En vez de “consenso”(que es reparto), la regla de la mayoría que es democracia.
En vez de resignación partidocrática, acción social de la valentía, de la razón y de la inteligencia.
En vez de Indignación, Revolución de la libertad.
Consejo Legislativo frente a Gobiernos que legislan impropiamente.
Plenos de Ayuntamientos que puedan controlar a los alcaldes en lugar de Alcaldes controladores de concejales de listas de partido.
Democracia frente a Partidocracia.
República frente a Monarquía.
Libertad de pensamiento, Libertad Política, Libertad Colectiva.
Libertad Constituyente frente a una Constitución otorgada en 1978 que el pueblo español no pudo conquistar en un periodo de libertad constituyente tras la muerte del dictador en la cama y la traición de la oposición, que habiendo firmado un documento de Ruptura Democrática, en el seno de la Platajunta Democrática finalmente prefirió el vergonzoso Pacto de la Transición acordado con los franquistas…
En vez de acudir a votar el 20N en las urnas de la servidumbre voluntaria a partidos monárquicos financiados y subvencionados por el Estado, abstención para la dignidad, para la libertad política y para la deslegitimación del sistema. Si no puedo elegir no voto. Reglas de juego democráticas y representativas de la sociedad.
Ni reaccionarios, ni conservadores. Revolucionarios.

jueves, 26 de enero de 2017

¡OH ARRIACA, OH TIERRA, OH CIELO, OH PIEDRA, OH AGUA! ( Juan Pablo Mañueco)

¡OH ARRIACA, OH TIERRA, OH CIELO,
OH PIEDRA, OH AGUA!
                                                 
¡Oh, Arriaca, oh tierra, oh agua, oh piedra, oh cielo, oh clara
urbe entre Henares y un monte erigida!,
¡Oh, Henares de heno fértil y de vida
pleno, debajo de esta Alcarria en ara!
 
¡Oh vega, oh huerta, oh prado, oh riba, oh fluida
pendiente en desliz de Guadalajara,
curvo cauce de arroyos de almenara!
¡Oh piedras de corriente siempre en ida!
 
Allí donde Alcarria y Campiña juntan
tierras altas y bajas en abrazo
uniéndose una y otra su regazo
entreverándose venas y puntas.
 
¡Oh, Arriaca, oh tierra, oh agua, oh piedra, oh clara
maravilla en beldades todas juntas,
entre tus torres y casonas hay adjuntas
hojas de vida en ti, oh, Guadalajara!
 
Que nadie me apartara,
oh patria de mis padres, oh mi Castilla en jara,
oh trozo de mi España y de mi Europa
que, tanto como a ella yo, ella me amara,
es cuanto deseara.
 
¡Pues si soy yo mi propio proel, conmigo vais ya siempre en popa!
 
Juan Pablo Mañueco,
del libro de viajes o novela "Viaje a la Alcarria, siglo XXI". (2016).

miércoles, 25 de enero de 2017

Mentira, tergiversación y eufemismo (MCRC Manuel Vega)

Mentira, tergiversación y eufemismo

Manuel Vega


Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional –MC RC
DIARIO ESPAÑOL De la República Constitucional

La comunicación de los gobernantes con los gobernados es la base de su propia permanencia. A través de la falsedad se puede apoyar una guerra impropia, minimizar una catástrofe o apaciguar y drogar a una Nación durante 40 años. Esta comunicación, generalmente unidireccional, puede considerarse mentalmente como un soporte de tres de pilares.
A continuación, describiré estas tres columnas que sostienen al Estado de partidos, unidas por un denominador común que es la falsedad, la falta de realidad que genera una envoltura muy diferente a su verdadero ser:
  • La mentira, que consiste en decir a los gobernados lo contrario de lo que los gobernantes piensan, saben o creen. Todo lo visible al público hoy en España está envuelto por la mentira ya que la corrupción se ha adueñado de todo. Es por eso que en la política estatal ya no queda rastro alguno de verdad.
  •  La tergiversación, esa modificación del sentido real de lo que unos y otros dicen sobre lo delictivo o propagandístico. En los grandes medios de comunicación, cuya labor principal es la desinformación, es la práctica más común, usada como arma de ataque de unos contra otros. Resulta divertido ver como jamás atacan aquello que es sustento común de unos y otros, aspectos como la financiación con dinero público de sus partidos, etc.
  • El eufemismo, usado para endulzar el veneno que desde el poder rezuma sobre una población intoxicada de largo tiempo pero no por ello inmunizada, pues aun sigue haciendo efecto, es verdad que cada vez menos.
Cada día, la sociedad, hastiada ya de tanta mentira, está buscando aire puro, luz, verdad… y esas columnas, cada vez más inestables, cimbrean y ya no hacen como antaño su función porque ya no soportan el peso de tanto engaño.
Desde el MCRC luchamos para que la sociedad sea consciente de todo este embuste y que, de una vez, seamos capaces de llamar a las cosas por su verdadero nombre, de arrancar las máscaras, nuevas y viejas, pues tanto formaciones como PODEMOS o CIUDADANOS son partícipes de la misma falsedad que el PP o el PSOE. Todos ellos herederos del franquismo y adaptados a la década de 2010 pero con la misma esencia de antaño.Todos ellos enemigos de la libertad jugando al mismo juego, y eso son, buenos compañeros de juego, de un juego sucio y sin reglas, reglas tan sencillas como serían la separación de poderes y la representatividad, es decir, la DEMOCRACIA. Algo que sólo un hombre, Antonio García Trevijano, denunció reclamando esas reglas en su día y que ahora reclamamos todos los que exigimos la libertad para España.